La Deep Web o «internet profunda» es un espacio en el que no se despliega el control de los buscadores convencionales, por lo que es un lugar más propenso al anonimato y a las actividades ilícitas.

Por Carolina Martínez Elebi

La empresa Trend Micro, especializada en el desarrollo de soluciones de seguridad innovadoras, publicó recientemente un informe titulado «Below the Surface: Exploring the Deep Web» (Por debajo de la superficie: explorando la Deep Web) en el que describe lo que sucede en la internet profunda.

Uno de los datos publicados en el informe asegura que más del 25% de vínculos entre la deep web y la superficie tiene fines de explotación infantil y pornografía.

Los investigadores de Trend Micro utilizaron su sistema Analizador de Deep Web (DeWa) para lograr obtener la información de la internet profunda que se dice que es inexpugnable.

Lo que hace este sistema es recopilar las URL vinculadas a la Deep Web, para intentar extraer información relevante vinculada a los sitios: contenido de la página, enlaces, direcciones de correo electrónico, encabezados HTTP.

En el informe se muestra que las drogas blandas, especialmente cannabis, son la mercancía más intercambiada en este espacio, seguido por productos farmacéuticos como Ritalin y Xanax, drogas duras, e incluso los juegos piratas y cuentas online.

Por otro lado, el precio que se pide por conseguir la ciudadanía estadounidense en sitios especializados en crear pasaportes es de 5900 dólares.

La compra de una cuenta robada de eBay o PayPal en una de las tiendas que las venden en la Deep Web cuesta 100 euros, y el 34% de las URL o direcciones que contienen «malware» en la web visible, o de la superficie, tiene conexiones con la internet profunda.

Es importante destacar que, además de los objetivos ilegales que menciona el informe de Trend Micro, en muchos países en los que no está garantizada la libertad de expresión, libertad de prensa, libre participación en la vida política o libertad para manifestarse contra un gobierno, muchos periodistas, activistas y ciudadanos recurren a la deep web para poder mantenerse comunicados sin correr tantos riesgos.

En algunos países, intentar expresarse o comunicar algo que no quiere ser comunicado, puede ser suficiente para que la persona reciba pena de muerte, por lo que la Deep Web aparece como un espacio de protección.