La instalación es simple y autogestionada.
Claro anunció el lanzamiento de un servicio de Internet inalámbrica para hogares, dirigido principalmente a clientes urbanos que aún enfrentan problemas de conectividad o carecen de acceso a fibra óptica.
El servicio aprovecha la infraestructura de telefonía móvil de la compañía para ofrecer internet fijo a través de un router autoinstalable, ampliando su alcance a usuarios fuera de la zona de cobertura de fibra óptica.
Si bien no tiene las mismas características de Starlink, busca competir en zonas urbanas con mal servicio de fibra o directamente carentes de él.
La promoción estará vigente del 20 de octubre al 30 de noviembre de 2025, con un plan de alta capacidad de datos y velocidad competitiva.
La empresa ofrece actualmente un plan de 400 GB, con una velocidad de descarga de hasta 100 megas y un costo de $16.999 por mes. El equipo necesario es un router de uso doméstico y tiene un precio de $165.600, aunque puede financiarse en cuotas.
Además, Claro menciona un plan base con velocidad de hasta 10 MB y 200 GB mensuales, además de la posibilidad de recomprar paquetes de 50 GB con validez de 30 días.
La instalación no requiere técnicos ni costos adicionales de activación: el usuario solo debe insertar el chip de Claro, enchufar el equipo y esperar hasta que la luz indicadora cambie a azul, lo que puede demorar unas seis horas.
La empresa recomienda ubicar el router lejos de microondas, heladeras u otras fuentes de interferencia.
No obstante, el router solo puede operar en la dirección de activación informada. Si se intenta usar en otro domicilio, el equipo se bloqueará automáticamente.
























