El especialista en medios, docente de las universidades de Quilmes y Buenos Aires e investigador  de Conicet disertó durante el segundo día de la 9° Jornada COLSECOR, que se realizó en la Ciudad de Córdoba el 10 y 11 de mayo.

Becerra situó su intervención en un momento de transiciones tecnológicas, socioculturales y
tecnológicas que lleva a preguntarse cómo es posible atender el objetivo de interés público en el marco de esta transición, que puede potenciar o dañar las economías regionales y las
producciones de contenidos locales.

En un primer momento repasó los cambios regulatorios introducidos desde la llegada de
Cambiemos al poder hasta la fusión entre Telecom y Cablevisión, actualmente bajo análisis     de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia. Al respecto analizó que “el régimen que se adopta a partir de diciembre de 2015 no tiene una articulación interna”, y agregó: “el Gobierno fue muy prolífico en decretos y resoluciones, a veces contradictorios entre sí”. Sin embargo, sostuvo que en estas normativas no hay una perspectiva convergente. Es decir, “se invoca la convergencia para decir que lo anterior quedó viejo, pero la regulación que viene tampoco es convergente”, de esta forma se abona a una mayor incertidumbre entre los actores del sector.

Para el analista es clave considerar las diferencias entre los actores. Al respecto marcó que el
Gobierno no considera el hecho de que la función de las cooperativas excede el ámbito del
mercado, ya que llegan con sus servicios a zonas “inviables” desde un punto de vista económico.

En este sentido indicó que “no se pueden regular las comunicaciones como si Buenos Aires fuera representativo del total del mercado”.

Becerra describió al mercado de la telefonía móvil como altamente concentrado y cartelizado. “Cuando dicen que [con la convergencia tecnológica] todos van a poder hacer todo, lo que no tenemos en cuenta son las asimetrías”, ya que los puntos de partida son diferentes, por lo que no es cierto que todos puedan efectivamente hacerlo. En cuanto al mercado de TV paga, el analista lo describió como más diverso, con mayor número de actores locales y de diferente envergadura. No obstante advirtió que “si la convergencia regulatoria no se hace con resguardos, este sector tendrá el mismo destino” que el mercado móvil y de conectividad.

Además remarcó que el régimen vigente fue presentado en 2016 como de transición al designarse una Comisión Redactora de un anteproyecto de ley de Comunicaciones Convergentes, del que aún no hay noticias oficiales. Por el contrario, a la fecha lo realmente existente es un proyecto de “ley corta”, que a su juicio implica dos afectaciones: una de orden económica vinculada a la competencia y otra referida al acceso y la libertad de expresión. En efecto, sostuvo que la “ley corta”, actualmente tratada en comisiones del Senado, es un nuevo capítulo de las asimetrías estructurales existentes.

En este sentido, aclaró: “pretender abrir y compartir redes entre dominantes nacionales y actores locales, es homologar y poner en pie de igualdad actores con lógicas muy diferentes”. Sobre el cierre de su intervención, advirtió sobre los peligros de asfixiar a los actores más chicos: “cuando en un ecosistema se promueve que haya una sola especie, deja de serlo, y pasa a parecerse más a un desierto que a un ecosistema”. La política, siguió Becerra, “no puede adoptar medidas para que lo que hoy es un ecosistema se convierta paulatinamente en un desierto”. Y en este sentido la “ley corta” sumada a la fusión Telecom-Cablevisión representarían una amenaza y un punto de inflexión.