Comscast formalizó la compra de los estudios de animación DreamWorks, la operación que se concreto en sólo dos semanas, fue valorada en 3.800 millones de dólares, la adquisición se realiza a través de su filial NBC Universal

NBC Universal ofrece 41 dólares por cada acción de los estudios que dieron vida a las sagas Shrek y Kung Fu Panda. DreamWorks Animation fue creada hace dos décadas por Steven Spielberg. Jeffrey Katzenberg, su actual consejero delegado, lleva tiempo buscando potenciales compradores. Comcast, que recientemente vio frustrada la operación para comprar Time Warner Cable, es la propietaria de los estudios Universal Pictures.

Katzenberg, una de las figuras más relevantes en la industria de Hollywood, da un paso atrás y será designado presidente de DreamWorks New Media, que integra NOVA y AwesomenessTV. El cofundador de los estudios de animación ya intentó cerrar un acuerdo con el operador de telecomunicaciones japonés Softbank y con la juguetera Hasbro. Pero el matrimonio con Comcast le genera muchas más sinergias por vía de ingresos y de distribución.

Comcast, que también opera los parques temáticos Universal, no ve que la operación vaya a toparse con problemas de la competencia, pese a que será un actor relevante en el lucrativo negocio del entretenimiento familiar. DreamWorks está considerada como una de las marcas más admiradas del mundo. Los estudios formarán parte de Universal Filmed Entertainment Group, de acuerdo con la información hecha publica.

Steve Burke, consejero delegado de NBC Universal, valora además la amplia cartera de derechos intelectuales que tiene DreamWorks Animation. Eso, explicó, le permitirá hacer crecer su producciones televisivas, de cine y potenciar los parques temáticos. “Las oportunidades son enormes”, augura el ejecutivo. Chris Meledandri, fundador de los estudios Illumination, es el designado para hacer de guía en el negocio de DreamWorks.

La operación se fraguó en solo dos semanas. El precio que ofrece NBC Universal es alto. Representa una prima de casi el 30% respecto al cierre de mercado el miércoles y supera el 50% si se toma como referencia la cotización de DreamWorks el martes, antes de que circulara por el parqué que las dos compañías estaban negociando la fusión.

La operación que protagoniza ahora Comcast recuerda a la que realizó Disney hace una década con la compra de los estudios de animación Pixar. La casa del ratón Mickey puso entonces sobre la mesa 7.400 millones para conseguir que Steve Jobs le cediera el control. Era una cifra desorbitada, pero que con el paso del tiempo demostró ser muy rentable para el conglomerado que dirige Bob Iger.

Fuente: El País