Los usuarios de Huawei seguirán teniendo acceso a la Play Store, pero no podrán actualizar el sistema operativo de sus celulares, lo que supone un problema de seguridad.

La decisión de Google de romper con Huawei abre el interrogante de qué va a ocurrir con los usuarios de dispositivos de la firma china. Google ha confirmado que los usuarios que actualmente poseen un dispositivo Huawei seguirán teniendo acceso a la Play Store y podrán descargarse todas las aplicaciones. Pero no podrán actualizar el sistema operativo Android bajo el que operan sus terminales, lo que supone un problema importante de seguridad.

Google ha suspendido los negocios con Huawei que requieran la transferencia de productos de hardware y software, excepto los cubiertos por licencias de código abierto, según señaló este domingo la agencia Reuters citando a una fuente cercana al conflicto comercial. La compañía ha explicado este lunes que los actuales usuarios de Huawei podrán seguir descargando apps en Google Play. «Estamos cumpliendo con la norma y analizando las implicaciones. Para los usuarios de nuestros servicios, Google Play y las medidas de seguridad de Google Play Protect continuarán funcionando en los dispositivos Huawei existentes”, ha afirmado Google en un comunicado. Por lo tanto, los usuarios de Huawei podrán seguir utilizando aplicaciones de Google como Gmail, Google Translate o Google Maps. Pero no van a poder actualizar el sistema operativo. Éste es el programa (software) que controla el teléfono móvil. Es primordial para el funcionamiento del terminal, ya que sin él, no sería posible utilizar las aplicaciones ni las funciones del smartphone.

“Las actualizaciones de productos, y sobre todo de sistemas operativos, hacen dos cosas: incorporar nuevas funcionalidades y corregir todos los errores que se detectan”, explica Juan Pablo Peñarrubia, presidente del Consejo General de Colegios Profesionales de Ingeniería Informática de España. El veto de Google “tiene importantes repercusiones para un proveedor importante como Huawei” que, además de teléfonos móviles, fabrica productos de todo tipo —por ejemplo, tabletas— que utilizan el sistema operativo.

Pese a que el propietario del sistema operativo es Google, Huawei podría desarrollar actualizaciones por su cuenta. “Huawei podría ofrecer actualizaciones de Android de seguridad cuando estén disponibles como código abierto. Pero esto te obliga a esperar bastante tiempo para disponer de la actualización”, explican fuentes de Google. Además, según Peñarrubia, “hacer una actualización sobre un producto que no es tuyo es difícil”. Por ello, destaca que la compañía tendrá que plantearse si desarrollar un sistema propio o usar otro existente.

El veto de Google a Huawei afectará sobre todo a los usuarios que adquieran una terminal de Huawei a partir de ahora, ya que además de no poder actualizar el sistema operativo, tampoco tendrán acceso a la tienda de aplicaciones de Google.

Huawei ha comunicado este lunes que “continuará aportando actualizaciones de seguridad a los modelos existentes de Huawei y Honor, así como a las tabletas, incluyendo aquellos ya vendidos y los que se encuentran en stock en el mundo”.

“Continuaremos construyendo un ecosistema de programación seguro y sostenible para aportar la mejor experiencia a nuestros usuarios», ha afirmado la compañía en un comunicado.

Huawei lamenta la decisión de Google tras destacar sus “contribuciones sustanciales” al desarrollo y crecimiento de Android en el mundo. “Como uno de los socios clave de Android, hemos trabajado estrechamente con su plataforma para desarrollar un ecosistema que ha beneficiado a usuarios e industria», asegura la empresa china.

Las consecuencias prácticas de este boicot pueden afectar a millones de usuarios de todo el mundo. Aquí te explicamos las principales:

Si tenés un celular Huawei o Honor (su segunda marca), este podrá seguir funcionando perfectamente. Google ha asegurado que seguirá dando acceso a las actuales actualizaciones de seguridad de las apps. Peor lo tendrán los que se vayan a comprar un nuevo modelo, ya que no tendrán las nuevas versiones de Android.

Si el veto de Google se confirma, Huawei no tendrá más remedio que construir desde cero su propio sistema operativo como ya han avanzado los directivos chinos en su primera respuesta oficial.

Fuente: El País