Organizaciones civiles y distintos grupos de defensores de derechos digitales de distintos países, denunciaron que el Marco Civil de Internet, un conjunto de reglas y leyes para proteger las libertades y derechos de usuarios de la red en Brasil está en peligro.
Presentado en abril de 2014, el marco fue resultado de la colaboración, durante varios años, de usuarios de Internet, académicos, expertos en tecnología y negocios y representantes del gobierno.
Ahora, 23 organizaciones, entre las que se encuentra Access Now, Article 19 y Electronic Frontier Foundation, acusaron en una petición firmada el pasado 1 de abril de 2016, que los legisladores brasileños están tratando de socavar los principios contenidos en el Marco Civil de Internet.
El congreso brasileño debatirá próximamente la aprobación de ocho nuevas piezas de legislación, emanadas de un reporte de la Comisión de Investigación Parlamentaria sobre Crímenes Cibernéticos.
En éste se criminalizan prácticas comunes de cualquier usuario de Internet, bajo la excusa de la prevención de crímenes y la seguridad; por lo que, las organizaciones firmantes urgen al congreso brasileño a detener las iniciativas de ley.
Algunas de las disposiciones contenidas en las propuestas de ley incluyen la capacidad de las agencias de seguridad para obtener una dirección IP sin orden judicial previa o la obligación de los proveedores de Internet de remover contenido considerado como “dañino al honor personal”, si pena de responsabilidades civiles o penales.
Éste tipo de iniciativas crea vacíos legales y ambigüedades que pueden ser aprovechadas para abusar de ellas, en este caso particular podría representar un peligro para la libertad de expresión.
Además, se amplía la definición de la invasión de aparatos electrónicos como un crimen, sin importar si se ha comprobado un daño o si fue exitoso o solo un intento; criminalizando la posible existencia de whistleblowers o de circunnavegar medidas de protección técnicas.
Uno de los aspectos más controversiales es la posibilidad de bloqueo de aplicaciones y servicios, incluyendo Internet, que como hemos mencionado con anterioridad no se considera como una medida que tenga proporcionalidad y es contraindicada por la ONU y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Recientemente, Brasil bloqueó con una orden judicial el funcionamiento de WhatsApp por, supuestamente, bloquear o no cooperar con un juicio al proporcionar información de las conversaciones de un traficante, cosa que la aplicación no puede hacer debido a su cifrado end-to-end.
El país sudamericano también aprobó la posibilidad de bloquear señales de celulares por razones de seguridad desde febrero pasado y durante los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
De acuerdo con lo aprobado, un bloqueo “debe limitarse a operaciones específicas, episódicas, urgentes y temporales relacionadas a la seguridad de los eventos deportivos mencionados anteriormente, o a eventuales operaciones de Garantía de la Ley y el Orden, en que se identifiquen evidencias concretas de riesgo potencial o inminente de acciones necesarias a la preservación del orden público, de la seguridad de las personas y del patrimonio”, cita la agencia Mediatelecom.
Finalmente, las organizaciones urgieron al congreso brasileño a detener las propuestas de ley que son contrarias a la libertad del Internet y, en cambio, seguir trabajando para hacer del Internet un espacio más abierto y libre.
Fuente: ContenidoLibre