A pesar de la oposición del presidente Trump, el operador de telecomunicaciones AT&T obtuvo la autorización para la fusión con Time Warner. De esa manera, logra salvar la compra la operación que le costó alrededor de 85.400 millones de dólares.
El gobierno de Donald Trump se había opuesto a la fusión. Pero el Departamento de Justicia no pudo probar cómo se dañaba la libre competencia con este acuerdo. La decisión abre la puerta a otras fusiones.
El Departamento de Justicia sostuvo que la operación iba a concentrar un poder excesivo en AT&T. De esa forma, podría elevar los precios para que los distribuidores de contenido accedan a los programas. Se trata de las cadenas CNN, TBS, TNT y HBO, además del estudio Warner Bros.
«El rechazo ha sido categórico a todos los argumentos presentados por el Departamento de Justicia», sostuvo el abogado de AT&T y Time Warner.
Consecuencias de la fusión
La solución al litigio tendrá consecuencias para otras operaciones. Por ejmplo, la compra de Disney de los activos de su rival Twente First Century Fox. El operador de cable Comcast estaba a la espera de una decisión para ver si presentaba una contraoferta. Al ser aprobada la fusión, dio luz verde a Comcast para ofertar y obligar a Disney a hacer una nueva oferta.
El argumento del Departamento de Justicia era que la fusión entre AT&T y Time Warner dejaría la industria en manos de dos gigantes integrados verticalmente.
Finalmente, podría ser una señal para que otros proveedores de Internet y de telefonía móvil participen de proceso similares. Verizon o Dish podrían formar parte de algún proceso de consolidación en marcha así como T-Mobile y Sprint.