Se trata del caso Elonis c/ Estados Unidos y el argumento es que se debe demostrar que el acusado tuvo la intención de amenazar.
El lunes pasado, 1º de junio, la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos revirtió la condena a un hombre de Pensilvania que había publicado en Facebook letras de canciones de rap violentas contra su ex esposa, que se habían considerado amenazas.
El caso se refiere a Anthony Elonis, un hombre de Pensilvania que había adoptado como personaje al rapero Tone Dougie. El presidente de la Corte Suprema, John G. Roberts Jr. llamó a sus declaraciones «crudas, degradantes y violentas», según The New York Times.
Roberts, por la mayoría, dijo que los fiscales deben hacer más que demostrar que las personas razonables podrían ver estas declaraciones como amenazas. El juez escribió que es importante el estado mental del acusado, aunque se negó a decir dónde se traza la línea legal.
El presidente de la Corte Suprema basó su opinión en los principios del derecho penal en relación con la intención más que la Primera Enmienda de protección de la libertad de expresión. La opinión de la mayoría fue modesta, aunque críptica.
El juez Samuel A. Alito Jr. votó con la mayoría, aunque dijo que la imprudencia de un acusado en hacer declaraciones amenazantes debería ser suficiente para exigir una condena. La opinión de la mayoría no tomó posición sobre esa posibilidad.
Por su parte, el juez Clarence Thomas emitió una crítica similar en su disidencia. «Nuestro trabajo es decidir cuestiones, no crearlas», escribió.
En Elonis c/ Estados Unidos el Tribunal decidió que los fiscales no hicieron lo suficiente para probar la intención de Anthony Elonis cuando publicó las letras amenazantes en Facebook dirigidas a su esposa.
Algunos de los mensajes contenían descargos o indicaciones de que aspiraban a ser arte o terapia. En el juicio de Elonis, su exesposa declaró que ella entendía los cargos de amenazas.
Elonis fue condenado en virtud de una ley federal que hace que sea un crimen comunicar «cualquier amenaza de perjudicar a otra persona». Fue sentenciado a 44 meses. Sin embargo, los abogados de Elonis dijeron que se necesitaba más y que los fiscales iban a tener que demostrar que el propósito del acusado había sido el de amenazar a alguien.
El juez Thomas, quien habría mantenido la condena de Elonis, dijo que el enfoque de la mayoría era insatisfactoria. «Este fracaso para decidir lanza a todos, desde los jueces de apelación hasta los usuarios de Facebook de todos los días, a un estado de incertidumbre.»