«La revolución del Whatsapp» se denomina a las protestas en el Líbano. Comenzaron el jueves a la noche y tuvieron como destinatarios a los dirigentes políticos. Ocurrió luego de que el Gobierno anunciara una tasa a las llamadas por plataformas de mensajería de internet.

Luego de 24 horas de protestas, el gobierno tuvo que dar un últimatum para que los partidos políticos destraben la toma de medidas y afronten la situación económica del país.}

Hasta el momento, al menos dos personas han muerto y varias decenas han resultado heridas en manifestaciones. «Cualquiera que sea la solución, ya no tenemos tiempo y yo personalmente me doy poco tiempo para que nuestros socios de Gobierno den una respuesta explícita sobre la solución o tendré otras palabras y el plazo es muy corto, es decir, 72 horas», dijo Hariri.

Marcha atrás al impuesto al Whatsapp

El detonante de las manifestaciones fue el anuncio de imponer un impuesto a las llamadas telefónicas a través de servicios de voz por internet, lo que generó una inmediata reacción en contra entre población y partidos políticos.

Ante la reacción, el Gobierno ha decidido retirar la propuesta con la que pretendía recaudar 200 millones de dólares para las maltrechas arcas del país.

Detrás de ese intento de tasa está la crítica situación de uno de los países más endeudados del mundo, con alrededor de 86.000 millones de dólares de deuda, alrededor del 150 por ciento del Productor Interior Bruto, y una deuda soberana que no alcanza ni el nivel de bono basura.

Gran parte de esa situación se debe al frágil sistema político libanés, en el que los cargos e instituciones se cubren en base a los diferentes sectores religiosos y políticos del país.

 

Fuente: Agencia EFE.