La empresa estatal Invap construirá en Bariloche el satélite de observación de la Tierra Sabia-Mar 1. Tendrá el objetivo de estudiar el mar y las costas latinoamericanas. Es parte de un proyecto de integración y cooperación entre la Conae y la Agencia Espacial Brasileña (AEB).
La misión conjunta constará de dos satélites, uno desarrollado en Argentina y otro en Brasil. La base de la operación es el Acuerdo de Integración y Coordinación Bilateral que ambos países firmaron en 2009 y ratificaron en 2017.
El satélite desarrollado por Invap hará la observación mediante parámetros de color del mar. Así buscará datos de concentración de clorofila, turbidez, coeficiente de dispersión, entre otros.
En tanto, a nivel global lo hará con 800 metros de resolución espacial, informó la Conae.
La nave tendrá un diámetro de 2 metros y altura de 1,9 metros en su configuración de lanzamiento. Una vez en órbita desplegará sus paneles solares para alcanzar una dimensión de 8,7 metros en su configuración de vuelo.
Llevará a bordo seis cámaras especiales, un colector de datos (DCS) y un monitor de radiación. Tendrá un peso de aproximadamente alrededor de 550 kilos. La vida útil se estima en en unos cinco años y tendrá una órbita a 702 kilómetros de altura.
Sabia-Mar: ¿por qué ese nombre?
El nombre del satélite proviene de la misión: Satélites Argentino Brasileños para Información del Mar. El diseño del proyecto se aprobó recientemente por un comité de expertos nacionales y extranjeros, realizada en su sede de Bariloche.
Este encuentro realizado entre el 16 y el 20 de abril, estuvo a cargo de once expertos del sector espacial de Argentina, Brasil, Estados Unidos y Francia. Se trata de un equipo de trabajo integrado por distintas empresas y organismos. Entre ellas: la Conae, Invap, Veng, la española STI, la CNEA y el IAR.
En su página web Conae informó que “luego de seis horas de deliberación, el comité revisor elaboró una serie de recomendaciones muy útiles que pusieron a consideración del proyecto, para finalmente explicitar que se cumplieron todos los criterios de éxito definidos para la Revisión”.
Por eso “aconsejaron comenzar con la siguiente fase de fabricación, ensamble, integración y ensayos del satélite de observación Sabia-Mar 1”.
