El nuevo contrato acordado con Nokia rondaría los 15 millones de euros, para una duración de seis años.
Telefónica adjudicó a Nokia la última parte de su núcleo 5G, completando la eliminación de Huawei de las redes críticas españolas.
En 2019, Telefónica había elegido a Huawei para su núcleo 5G, pero las presiones internacionales, con Estados Unidos a la cabeza, forzaron un cambio de rumbo. La noticia significa un cambio geopolítico significativo.
El valor estimado del nuevo contrato con Nokia es de 15 millones de euros por seis años de duración.
Con la medida que tomó la empresa, no fue necesario que exista un veto gubernamental que frene las operaciones de Huawei.
Sin embargo, la salida de Huawei de España también tiene que ver con políticas públicas. La exclusión de la marca de las ayudas públicas al 5G rural por un veto indirecto fue fundamental para que pierda espacio. La estrategia gubernamental busca que no haya «proveedores de alto riesgo» para poder alcanzar fondos públicos.
La estrategia de sustitución requiere un enfoque cauteloso y meticuloso, siguiendo un calendario preciso por fases y regiones. Este proceso es fundamental para evitar cualquier interrupción del servicio a los usuarios durante la transición, que se estima tomará más de un año debido a la complejidad de modificar infraestructuras críticas.
De esta manera, Huawei ya no tiene presencia en los núcleos 5G en las tres grandes operadoras de España.
Tras los cambios, Telefónica tiene sus núcleos de red divididos entre Nokia (también lo tiene Vodafone) y Ericsson (también lo tiene Orange).
El núcleo de red 5G es esencial para gestionar las conexiones y datos de los usuarios, convirtiéndolo en un componente crítico para la seguridad nacional.