La Policía holandesa se infiltró en un grupo de Whatsapp y dejó un mensaje advirtiendo a sus integrantes.  «Hemos tomado nota del contenido de este grupo. Con la provocación y la incitación a la violencia (citándose para pelear) ustedes están cruzando un límite. Esto es punible y como Policía no lo toleraremos. Todos los datos y conversaciones de este grupo se han guardado», fue el mensaje que dejó la Policía.

Las fuerzas de seguridad de dicho país tienen una división especializada en adolescentes. La misma accede a perfiles en redes sociales y, en algunos casos, interviene directamente en grupos de Whatsapp.

En este caso, la policía intervino en un grupo de whatsapp creado para arreglar peleas entre jóvenes.

Según informó Diario.es los agentes le dieron 24 horas a los miembros para dejar el grupo. Además, les informaron que si cambiaban de plataforma se arriesgaban a ser procesados por la Justicia.

La Policía en un grupo de Whatsapp

La mayoría de los jóvenes siguió las instrucciones, pero dos de ellos continuaron enviando mensajes. Los policías infiltrados tomaron sus datos y enviaron un informe al Ministerio de Justicia.

Desde la Policía de Zeeland explican que «no es excepcional» que intervengan cuando detectan «señales» de un problema, sino que es más bien su «trabajo diario».

Los agentes de la juventud son policías comunes que han recibido formación específica para tratar cuestiones relacionadas con jóvenes de entre 12 y 23 años.