De sancionarse la ley, la empresa del estado se encargará del conteo de votos.
Con miras a la implementación del nuevo sistema de voto electrónico, una de las novedades que se impulsa desde el Ministerio de Modernización es que el centro de conteo se traslade a los datacenter de Arsat, desde donde recibirán los resultados electorales de los distintos centros de votación para su procesamiento, de acuerdo a lo señalado en La Nación.
Arsat tiene una certificación Tier III, una de las más altas clasificaciones internacionales que describen al hardware desde el punto de vista de garantizar su funcionamiento en forma ininterrumpida. Según el presidente de Arsat, Rodrigo De Loredo, «estamos preparados para una recepción tal de datos como la que necesita un acto electoral, aunque por supuesto vamos a tomar más recaudos».
Esto modificaría el esquema habitual utilizado en las últimas elecciones nacionales. Hoy en día de cada sala de votación se emiten actas definitivas y provisorias. Estas últimas son las que cargan cada una de las delegaciones del correo y las remiten a un centro en la provincia de Buenos Aires, del Correo Argentino, donde se suben los datos del día de la elección. El Poder Judicial, por otro lado, trabaja en el definitivo, que es el que se demora más tiempo. Todos estos pasos son los que, dicen, se evitarían con la boleta única electrónica, porque los resultados de cada mesa se enviarían directamente a Arsat.
Sobre el software, también habrá cambios: la novedad será que no se va a abonar por una solución «llave en mano», sino que serán tres proveedores: habrá una empresa encargada del desarrollo, otra del mantenimiento y una última de la seguridad del sistema. «Las distintas empresas deberán dialogar. No les queda otra, porque sino no van a poder participar de la licitación», confían desde el Ministerio.