La Comisión Europea ha informado a Google la presentación de cargos contra la compañía, ya que habría vulnerado algunos preceptos de la normativa antimonopolio de la Unión Europea, abusando de su posición dominante mediante la imposición de restricciones a los fabricantes de dispositivos Android y operadores de redes móviles.

Según el órgano ejecutivo de la Unión Europea, Google habría puesto en marcha una serie de mecanismos y estrategias en sus dispositivos móviles para favorecer el dominio de su buscador por encima del de la competencia en Android, de forma premeditada y y exclusiva:

Las prácticas significan que el buscador de Google está preinstalado y configurado como predeterminado o exclusivo en la mayoría de los dispositivos Android que se venden en Europa.

Además, la comisión apunta a que con estas prácticas, la compañía ha buscado perjudicar a los consumidores evitando el acceso de los sistemas de búsqueda rivales dentro de su sistema operativo y en los terminales de la competencia, vendidos bajo el paraguas de las operadoras.

También parecen perjudicar a los consumidores por sofocar la competencia y restringir la innovación en el móvil en sentido amplio.

El procedimiento contra Google por abuso de posición dominante se inició en abril del año pasado cuando la Comisión consideró que la compañía del buscador abusaba de su poder en los mercados de búsqueda en Internet y en los sistemas operativos móviles inteligentes -respecto a las licencias y las restricciones de su tienda de aplicaciones-, ostentando más del 90% de cuota en cada uno de los mercado del Espacio Económico Europeo.

Durante este año de investigación, ha Comisión ha concluido que la compañía ha abusado de su posición de dominio bajo estos términos, por los que hoy eleva pliego de cargos contra ella:

  • Exigir a los fabricantes la preinstalación de la Búsqueda de Google y del navegador Chrome y la preconfiguración la búsqueda de Google como el servicio de búsqueda por defecto en sus dispositivos, como condición para licenciar ciertas aplicaciones propietarias de Google.
  • Evitar la venta de dispositivos móviles inteligentes que ejecutan partes del código de fuente abierto de Android en sistemas operativos de la competencia.
  • Dar incentivos financieros a los fabricantes y operadores de redes móviles a condición de que instalen la Búsqueda de Google en sus dispositivos de forma exclusiva.

De esta forma, la Comisión considera que estas prácticas comerciales pueden provocar una mayor consolidación de la posición dominante de Google en los servicios de búsqueda en Internet, ya que perjudica a los consumidores y no se les ofrece libertad de elección, frenando la innovación:

Creemos que el comportamiento de Google niega a los consumidores una gama más amplia de aplicaciones y servicios móviles y se cruza en el camino de la innovación para otros jugadores, violando las normas antimonopolio de la UE. Estas reglas se aplican a todas las empresas activas en Europa. Google tiene ahora la oportunidad de responder a las preocupaciones de la Comisión. – Margrethe Vestager, Comisaria europea de Competencia

Tras el anuncio de la Comisión, Google ha respondido con un comunicado en el que expone su punto de vista sobre las acusaciones vertidas por el órgano ejecutivo de la UE:

«Android ha ayudado a fomentar un notable y sostenible ecosistema basado en un software de código abierto y promoviendo la innovación. Esperamos continuar trabajando con la Comisión Europea para demostrar que Android es bueno para la competencia y para los usuarios.»

Ahora se da la oportunidad a la compañía a que responda formalmente a las acusaciones de la Comisión, que han tomado tintes similares al caso de Microsoft e Internet Explorer en 2010, que se cerró con una multa millonaria y la obligación a los de Redmond de implantar un sistema de elección de navegador en su sistema operativo de escritorio.

Fuente: Hipertextual